domingo, 30 de mayo de 2021

LA INDUSTRIA DE LA MODA Y LA SOSTENIBILIDAD por Carla García Bonillo

 

    La industria de la moda es la segunda industria más contaminante del mundo, solo por detrás de la petrolera. Sus consecuencias medioambientales y sociales son muchas, aunque la parte más dañina de esta industria es la ‘fast fashion’ o moda rápida. El primer paso para solucionar todos estos problemas es crear conciencia y voluntad de cambio.

    Las principales consecuencias medioambientales de la industria textil son: la contaminación y el consumo excesivo de agua, la acumulación de deshechos químicos y microfibras en los océanos, emisiones de gases de efecto invernadero, la desertificación y la deforestación.

-La contaminación y el consumo excesivo de agua es un gran problema debido a que el 20% de la contaminación del agua viene del tratamiento y teñido de los textiles y 20.0000 toneladas de tintes van a las aguas residuales cada año.

-La acumulación de deshechos, químicos y microfibras en los océanos son quizá el problema más importante: 190.000 toneladas de microfibras plásticas (utilizadas en el 72% de nuestra ropa) acaban en los océanos cada año, y pueden tardar 200 años en descomponerse; el 23% de los químicos producidos en todo el mundo son utilizados por la industria textil; y no te dejes engañar por las prendas ‘100% naturales’ porque al menos el 27% de su peso es hecho por químicos. Debido a todo esto, los científicos han descubierto que podemos introducir el plástico en nuestra dieta debido a la acumulación de éste en nuestros océanos.

-Las emisiones de gases de efecto invernadero también tienen un papel importante en los problemas de la industria de la confección, debido a que ésta representa el 10% de las emisiones mundiales de carbono (23kg de este gas son generados por cada kilo de tela producido), las fibras sintéticas se fabrican a partir de combustibles fósiles y las baratas también emiten gases como el N2O (300 veces más dañino que el CO2).

-La desertificación y deforestación también son preocupantes porque esta industria lleva a cabo un sobrepastoreo de los pastos, un uso masivo de productos químicos y produce mucha deforestación (se talan más de 70 millones de árboles de bosques antiguos y en peligro de extinción cada año para la producción textil). Esto producirá una disminución del 30% de comida en los siguientes 20-50 años.


    Las consecuencias sociales son numerosas, entre las que se encuentran los salarios, los horarios de trabajo, las condiciones de salud y seguridad, trabajo infantil y esclavitud. Los salarios en estos países son el mínimo legal en los países de producción, que son países con normativas frágiles, ya que este salario suele ser 5 veces menos que el salario vital. Los horarios de trabajo son indignantes, ya que las personas trabajan hasta 16 horas diarias, 7 días a la semana; y no hay condiciones de salud ni de seguridad: mucha gente muere por esta industria debido a, entre otras cosas, la maquinaria y los químicos utilizados. Muchos niños también trabajan en esta industria, y son todavía más vulnerables a caer enfermos o morir por trabajar en esto ya que tienen unas condiciones aun peores y sus cuerpos no les permiten ejercer este tipo de labores. La esclavitud en la industria textil también es un hecho.

    Como he dicho antes, la ‘fast fashion’ es una de las partes más preocupantes de la industria de la moda. Muchos la definen como ‘el monstruo en nuestros armarios’. Esto se debe a que la disminución de la calidad de las prendas y la influencia de las tendencias en nuestro armario producen un gran aumento de los deshechos, las empresas dedicadas a la moda rápida producen más ropa y colecciones de las necesarias (hasta 52 microcolecciones), y esta ropa no es respetuosa con los trabajadores ni con la naturaleza. 80 billones de prendas son producidas cada año por la moda rápida, un 400% más que hace 20 años.

Aquí dejo os decálogo de soluciones a los problemas planteados:

1.-Comprar ropa de segunda mano. Aunque esto tiene mala fama, muchas veces se encuentran ‘reliquias’ en estas tiendas, y son de muy buena calidad, ya que si no lo fueran no estarían allí a nuestra disposición.

2,.No consumir tanta ropa de grandes multinacionales que son de la ‘fast fashion’ y son muy dañinas.

3.-Fijarse en las etiquetas para saber de qué materiales está hecha la ropa que compramos para darnos cuenta de si es más contaminante o menos.

4.-Comprar más ropa básica y menos ropa acorde con las tendencias para poder usarla más tiempo y conjuntarla mejor (esta es la causa de que muchas veces tengamos demasiada ropa de acuerdo con las tendencias y aun así no sabemos qué ponernos).

5.-No comprar ropa hecha de microfibras o de materiales sintéticos, ya que son los más dañinos.

6.-Usar la ropa durante más tiempo.

7.-Comprar menos, pero de mayor calidad. Remendar las prendas y reciclarlas.

8.-Favorecer a los pequeños comercios y también a las marcas que fabrican menos colecciones.

9.-Comprar ropa fabricada en el país donde se vive, para reducir la huella de carbono y además favorecer a empresas locales cuya mano de obra no es maltratada.

10.-Lava siempre la ropa nueva antes de usarla por primera vez.




Fuentes:

https://es.sustainyourstyle.org/en/whats-wrong-with-the-fashion-industry

https://es.sustainyourstyle.org/old-environmental-impacts#anchor-link-greenhouse





2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante la información.
No somos conscientes de que podemos aportar nuestro granito de arena para hacer más sostenible nuestro planeta.
Gracias por concienciar.

Anónimo dijo...

Muy buena reflexión. ¡Gracias!

Hay una frase de una diseñadora de patchwork que está muy bien:
"Nada se pierde, todo se transforma"